Reconocer las emociones que sentimos en un determinado momento y entender qué ha producido esa emoción nos ayuda a reducir la intensidad con la que lo experimentamos. Hemos trabajado en el aula con el semáforo de las emociones y ahora os toca a vosotros, familias, seguir hablando con vuestros hijos para juntos aprender a regular sus emociones de forma positiva.
Cardio nos acompaña a lo largo de la vida y juntos debemos cuidarlo no solo a nivel físico sino también a nivel emocional. ¡Gracias, familias, por acompañarnos en la maravillosa tarea de ayudar a vuestros hijos a su desarrollo integral!
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